¿Quién no conoce a Jesús Álvarez? Toda la vida contándonos historias del mundo deportivo desde RTVE. Lo que pocos sabíamos es que practica casi todos los deportes de los que habla: esquí, rallies, ciclismo y, por supuesto, motociclismo. Desde los 16 años tiene moto y, con ella, miles de historias que contarnos. Nos fuimos de ruta por la Sierra de Madrid con Jesús para tomarnos unas cervezas y que nos hable un poco de su historia.
Arrancamos las motos y nos ponemos rumbo hacia El Escorial. Aunque como buen motero conoce muy bien esta Sierra, aunque conseguimos sorprenderle con un agradable rincón junto al pantano de Valmayor. En este idílico punto, decidimos parar a tomar nuestra primera caña SIN.
Como esperamos, empezamos charlando de motos. Desde muy pequeño, Jesús entendió que tenía el gusanillo del motor en el cuerpo, tanto de los coches como de las motos. Aún recuerda como en 1970, con 12 años, se coló en el circuito del Jarama para poder ver como Ángel Nieto ganaba su carrera de 125 cc y se proclamaba campeón del mundo.
Aprendió a conducir en las calles, aún sin asfaltar, de su madrileño barrio de Chamartín. Su primera moto fue una Bultaco Junior 74 de la que guarda fabulosos recuerdos. Ella le acompañó en el camino al colegio a hacer COU, y luego a la Universidad. Más tarde, llegaron una Piaggio X9, una Integra, una Honda Forza, una Harley Sporster R 1200, e incluso, tuvo una Gas Gas de Trial. En la actualidad rueda por ciudad con su BMW 600 sport y con la R 1200 R, con la que ha venido a vernos. Está claro que por muchos años que pasen no tiene pensado bajarse de la moto.
Continuamos nuestra ruta por la Sierra y paramos en uno de los puntos de encuentro entre los moteros por excelencia: El Puerto de la Cruz Verde. Es el momento de conocer más a nuestro compañero Jesús.
A punto de cumplir 40 años en RTVE, es el presentador más veterano de la cadena pública. Empezó siendo un adolescente y, por casualidad, fue a parar a la sección de deportes. Su jefe le dijo que no podría escribir para los informativos hasta que no tuviera el título de periodista; sin embargo, podría hacerlo para deportes. Así que no lo dudó y se puso manos a la obra. Desde entonces ha tenido la oportunidad de retransmitir todo tipo de competiciones: desde el esquí, llegando a entablar una buena amistad con Paco Fernández Ochoa; hasta el deporte rey, el fútbol. De hecho, para Jesús, su gran hito profesional fue poder estar en Johannesburgo informando de la victoria de España en el campeonato del mundo.
Dentro del motor, destacó en el mundo del rally. Junto a su amigo Lorenzo Milá, siguió varios campeonatos del mundo de los que recuerda mil aventuras. Una de las anécdotas que nos cuenta trascurre en Londres, cuando les robaron el coche con todo el equipo profesional. La policía les dijo que, seguramente, el caco sería un aficionado a los rallies que hurtó el coche para poder ir a ver las pruebas y que aparecería intacto con todo. Así ocurrió. Los bobbies les devolvieron todo su equipo cuando estaban a punto de entrar en el avión de vuelta. De está época también guarda una gran impresión de Carlos Sainz, a quien considera el mejor deportista que ha conocido junto con Rafa Nadal.
Sus historias darían para un libro pero se nos acaba el tiempo. Eso sí, antes de despedirnos, nos deja claro que es un gran SIN Rider, ya que jamás prueba el alcohol cuando conduce o pilota. Otra muestra más del figura con el que hemos pasado el día: nuestro amigo Jesús.
