
Llega el buen tiempo y con él las ganas de montar en moto y de ir a descubrir esa carretera perfecta con el sol a la espalda. Hace algunas semanas os dábamos algunas claves para comprar una primera moto. Si por fin te has decidido a dar el paso y eres de los que han elegido una de segunda mano, os vamos a dar unas pautas para que no os den gato por liebre, porque a veces la ilusión o la impaciencia nos pueden llevar a cometer errores. Hoy en SIN Riders hablamos con los expertos Gemma Moré de Milla Custom y con Manuel López de TCM Motor, que nos dieron estos cinco consejos fundamentales
1. Documentación en regla
Es lo más importante y la base de cualquier moto que queramos comprar. Lo mejor es acudir a Tráfico con la matrícula y pedir un informe para que sepamos si sobre ella pesan embargos, multas o cualquier otro tipo de carga. Es fundamental también que comprobemos que los números de chasis concuerdan en la documentación y en el chasis de la propia moto, ya que en algunas ocasiones se han confundido en tienda y han dado los papeles de un modelo similar pero con un error en este apartado. Mucho cuidado con eso.
2. Los kilómetros
Es una de las partes más delicadas. Recuerda que quitar kilómetros a un vehículo es un delito, pero algunos por desgracia lo hacen. Si en la documentación vemos que la moto viene de EEUU o Reino Unido, esa información va en millas y puede cambiar al alterar el cuentakilómetros. Algunos detalles en los que podemos fijarnos para saber si los kilómetros son los que dicen son: algunas partes “sobadas”: unos puños desgastados equivalen a unos 40.000 km por ejemplo (hay que fijarse también en la goma de las estriberas, los pulsadores de las piñas o el desgaste de la pintura del depósito que se roza con las piernas). Si vemos marcas de pegamento en las llantas de los plomos de contrapeso, pueden indicarnos el número de veces aproximado que han cambiado los neumáticos y por tanto los kilómetros que tiene. Otra parte importante puede ser el kit de trasmisión en una deportiva ya que sabiendo que si el original dura unos 25.000 km, si vemos que no lo lleva, es que tiene más.
3. Estado de los neumáticos
No te fíes de su apariencia. Pueden estar con el dibujo muy marcado pero no agarrar nada porque el caucho esté cristalizado. Fijarse en los números de la banda lateral nos indicará el año de fabricación. Otro truco, puede ser clavarle la uña. Si vemos que más o menos podemos, el neumático todavía no ha cristalizado.
4. Motor
Dicen los expertos que lo mejor siempre es ver una moto sucia. Así se puede identificar mejor si tiene pérdidas de aceite. Hay que mirar bien si hay algún tipo de fuga. También podemos ver si el motor ha tenido que abrirse o no, fijándonos en los tornillos que los cierran, ya que si están rayados es que ha sido manipulado.
5. Acudir a un profesional
Este posiblemente sea el mejor consejo de todos. Lo mejor es acudir a un profesional con la moto que queramos comprar y que nos haga una valoración. La mayoría no te cobrará nada o como mucho, una hora de mano de obra. Si te toca pagar, será una nimiedad y te puede salvar de un embolado de reparaciones y gastos sin fin.